Sin embargo hay quienes aún hoy creen en que tomar un inmueble en arrendamiento directamente con el propietario es lo mejor.
Para esas personas hemos decidido exponer nuestras razones y experiencias, pues son muchísimos los casos en los que hemos entrado a resolver situaciones y asesorar trámites legales en los que las personas implicadas dentro de la contratación de arrendamiento del bien, padecen molestias, anormalidades y hasta problemas de carácter legal.
El papel todo lo “puede” y ante una contratación nada mejor que contar con la asesoría y acompañamiento de una empresa capaz de garantizar que se cumplan los acuerdos, se respeten las normas y se atienda de manera idónea y oportuna cada una de las necesidades de las partes.
Los propietarios, sin afán de molestar o herir, muchas veces se tornan incómodos, invasores, irrespetuosos y abusivos en cuanto al cuidado, el canon del inmueble, la privacidad de los inquilinos, las visitas y decisiones que toman los inquilinos y hasta entrometidos en la vida de quienes ocupan la propiedad.
Como compañía nos sentimos con el derecho y autoridad para responder ese interrogante inicial y afirmar enfáticamente que lo mejor es optar con agencias de arrendamientos que medien, asesoren y acompañen de manera idónea los procesos de arrendamiento para evitar malestares y asegurar una estancia tranquila y en paz.